Rol del gestor de liderazgo en esta nueva economía

Conoce en este artículo las características del gestor de liderazgo de las organizaciones en la actualidad. 

Antes de revisar la función del líder como profesional de cambio, primero me gustaría enmarcar cómo el verdadero objetivo de líder se va transformado conjuntamente con los cambios y la globalización. 

Para ello mencionaré a Pereyra (2012) quien menciona que en estos “nuevos tiempos hipermodernos” (Lipovetsky et al., 2006) la figura del líder se caracteriza por transmitir una imagen exitosa, en medio de los aplausos y aclamaciones de la multitud, exhibiendo una sonrisa que jamás se apaga frente a las luces, flashes y cámaras, encabezando el rating de la popularidad, haciendo brillar su imagen en la TV, los diarios y las revistas de los kioscos. 

El líder actual 

Es un profesional de los medios de comunicación, en los cuales importa más el parecer que el ser, el gesto triunfal que la inteligencia, las habilidades dialécticas que una moral incorruptible. 

Es que en esta cultura o “civilización del espectáculo”, como dice Vargas Llosa (2012), “vivimos la primacía de las imágenes sobre las ideas” (Ídem, 46), cuando se privilegia “la banalidad sobre lo profundo y lo frívolo sobre lo serio” (Ídem, 47), donde se entiende “el mundo, la vida, según la cual todo es apariencia, es decir teatro, juego y diversión” (Ídem, 51). 

Son tiempos “light” (Rojas, 1999), sin valores consistentes y sustentadores de conductas íntegras, nobles y elevadas. Por lo tanto, en este contexto los líderes representan actitudes edulcoradas, de verbosidad gratuita, narcisista, resultando maestros de la pose y del gesto triunfal. 

Aquí quiero acotar que nos enfocamos al término de “Líder”, bajo una postura individualista, no como algo natural a favor del equipo y/o pares, sino como una meta y un premio al Ego.

Liderazgo en organizaciones 

Uno de los aspectos más nocivos y perjudiciales que se observan en las organizaciones de nuestros días es el hallazgo de supuestos líderes, falsos en realidad, que conocen poco y nada de la naturaleza humana. 

Lamentablemente, no se conocen ni a sí mismos, y aun así, quieren liderar a otros. Se manejan torpemente como un elefante en un bazar, rompiendo y destruyendo elementos muy valiosos a cada paso. 

El líder genuino y auténtico debe ser un estudioso constante de la naturaleza humana, pero no solamente desde alguna de sus dimensiones, lo cual conducirá necesariamente a un reduccionismo, sino del conjunto de ellas. El líder debe ser un experto conocedor de la corporeidad del ser humano, de sus aspectos psíquicos y emocionales, de su estrato mental e intelectual y, por último, debe ser un experto en espiritualidad (Inteligencia Emocional). (2)

Lider y liderazgo

“El auténtico liderazgo trata sobre la capacidad de tomar acción, movilizando pasiones, valores y creencias, para extender el propósito del sistema con la finalidad de marcar la diferencia en el contexto en que se encuentra. Este rol de liderazgo surge en todos los niveles y permite a la organización o sistema adecuarse a dicho propósito”. (3)

Quise centrarme en definir estos dos términos que comúnmente son tomados como sinónimos o atribuyen al término de líder como el ejecutante y el liderazgo la acción.

Rescato la importancia de dividir estos términos, por el cual me he inclinado más que a ser un líder, ser un gestor de liderazgo. Para ello y para explicar mejor esta lógica, creo conveniente hacer referencia al texto de “No Líder, Liderazgo” escrito por Luis Felipe Calderón quien menciona:

“Es una lástima el tiempo, dinero y esfuerzo que hemos desperdiciado tratando de establecer qué es un “líder”, cuáles son sus características, porque fulanito sí es “líder” y porque menganito no lo es. Es una lástima el tiempo, dinero y esfuerzo que seguimos desperdiciando en toda esa serie de creencias nocivas. Se afirma que para ser “líder” se necesita ser persuasivo, ético, persistente, extraordinario comunicador, orientador, guía, y presentar… las tantas características encontradas en cualquiera de las listas que proliferan por allí.

Lo malo es que millones de personas en el mundo, especialmente gerentes, se desviven tratando de desarrollar todas esas facultades, cosa que es imposible. Pero lo peor es que al no poder tenerlas se desviven tratando de simular ante sí mismos y ante los demás que si las tienen. Esto ha llevado a los gerentes, o a los que pretenden serlo, a una impostación poco saludable.

Un enfoque nada nuevo (que aprendí del doctor Daniel Gilá Adi hace una decena de años) se ha mostrado como el más útil en mi experiencia como consultor y desarrollador de gerentes: no existen “lideres”, existe liderazgo. Y liderazgo, además, es eventual, ubicuo, evanescente y colectivo”.

El que ejerce liderazgo es quien ha logrado manejar la red compleja de interacciones de la organización logrando alterar el rumbo de los acontecimientos.

Y más que buscar el patrón ideal y tratar de fingir que encajamos en él, será mejor que desarrollemos nuestros propios talentos y busquemos las oportunidades apropiadas para aplicarlos con éxito, centrándonos en el manejo de las relaciones y el contexto. (4).

Es importante detectar los roles de liderazgo, el cual lo percibo, no como una mutación o cambio durante un proceso en el tiempo, sino como roles que el “líder” debe realizar de acuerdo a la circunstancia y madurez del grupo.

Asimismo, descartaría el tipo de líder que solo engendra una dependencia entre guía y seguidores quedándose allí. Resaltaría al que da las facilidades para que cada colaborador (entorno laboral) pueda generar liderazgo en su grupo, no depender de una sola persona, sino crear iniciativa y reforzar la autoestima de los integrantes del grupo para que ellos puedan ser parte del liderazgo en equipo.

El liderazgo dentro de un equipo de trabajo u organización no debe estar monopolizado por un solo líder, sino este liderazgo debe encontrarse distribuido. Si quieres avanzar en tu carrera profesional y desarrollar tus habilidades de liderazgo, te invitamos a visitar nuestra guía "La ruta hacia tu posgrado". Conoce más aquí. 

 (1) Pereyra, M. La construcción del líder. Apuntes Universitarios, Vol. 2, Nº. 2, 2012, págs. 29-38.

(2) Tomado del libro “La esencia del liderazgo” de Hugo Landolfi.

(3) The Grubb Institute.

(4) Calderon. L.(2006), Todos somos humanos…pero unos más humanos que otros. – Lima: Universidad Esan 2006.-  177 p.