A través de los servicios, leyes, regulaciones y otras acciones, la labor del Estado es la de generar valor en beneficio de los ciudadanos y garantizando sus derechos. En tal circunstancia, la labor del gestor público resulta de vital importancia para generar valor público a través de bienes y servicios de primer nivel en favor de la sociedad.
“Valor público es la sensación que tiene el ciudadano de la manera en que se está beneficiando al acceder a un servicio público, es decir qué sensación le queda a un ciudadano cuando se acerca a un hospital a recibir la atención básica de salud pública, qué sensación de satisfacción le corresponde a un ciudadano cuando envía a sus hijos al colegio, entre otros”, explica el catedrático Edgar Ortegón, autor del libro “Políticas públicas: Métodos conceptuales y métodos de evaluación”
A continuación, el profesor Ortegón explicará algunas formas que permitirán aumentar el valor público a los gestores públicos:
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Realiza encuestas a los ciudadanos
Suele ser común que en las encuestas de opinión ciudadana existan altos niveles de desaprobación de los gobernantes y malas opiniones respecto de las labores del Estado. El profesor Ortegón propone que el valor público sea medido también a través de encuestas y así, tener información precisa sobre el impacto que tienen las labores del sector público en beneficio de la sociedad.
“Tanto el sector público como la academia pueden aportar mucho mediante encuestas periódicas, trimestrales o semestrales que muestren cómo está la ciudadanía percibiendo esos servicios públicos. Ojalá las encuestas sean de la mayor periodicidad posible”, señala el catedrático Edgar Ortegón, docente de la Universidad Continental.
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Una política de gobierno abierto
Otras de las formas de generar valor público, señala el profesor Ortegón, es empoderando a los ciudadanos y otorgándole facultades para que sea él quien fiscalice a las autoridades. Con una política de gobierno abierto, la ciudadanía estará pendiente de quienes son las autoridades que aportan en la creación de valor público y en la mejora de los servicios públicos.
“También es necesario promover todo lo que se llama gobierno abierto, es decir permitir el acceso de la ciudadanía a la información sobre los servicios públicos, las plataformas de internet para que el ciudadano se informe qué hace el Ejecutivo, qué hace el Legislativo, y qué hace el Poder Judicial”, explica el docente Edgar Ortegón.
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Fiscalización de los medios de comunicación
La fiscalización también puede realizarse a través de los medios de comunicación, quienes deben velar por el cumplimiento del Estado en los servicios públicos de calidad. El profesor Ortegón señala que el periodismo es también un elemento importante en la lucha contra la corrupción en todas sus formas y sus manifestaciones.
“También es otra medida que los medios de comunicación y la prensa informen sobre la calidad de los servicios públicos. (…) Creo que eso hace falta en la mayoría de los países de América Latina: medir la calidad de la forma en cómo se entrega y se accede a los servicios públicos en nuestros países”, explicó el docente de la Universidad Continental.
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Rendición de cuentas públicas
Una estrategia para aumentar el valor público es la iniciativa propia del Estado en rendir cuentas y divulgar los elementos que generan un mal manejo o un manejo corrupto de los recursos estatales. Un Estado transparente y que informa a sus ciudadanos sobre los malos elementos infiltrados es un Estado moderno y que trabaja por el bienestar de su sociedad.
“Cuando un Estado rinde cuentas e informa sobre el uso de los recursos, pues pueden mejorarse la calidad de esos servicios. Con la sociedad del conocimiento, con el uso del celular podemos medir y hacer más palpable la insatisfacción o satisfacción de los ciudadanos con los servicios públicos”, sostiene el profesor Ortegón.
Consideremos también la lucha frontal contra todas las formas de corrupción tanto dentro como fuera del Estado. A través de la generación de valor público, el Estado debe generar oportunidades para el desarrollo de sus ciudadanos. La satisfacción de contar con servicios públicos generará confianza por parte de las personas hacia los servidores públicos, lo cual permitirá el desarrollo de una localidad, de una ciudad y de todo el país.
“El valor público tiene tres componentes: qué grado de satisfacción tiene el ciudadano al acceder a ese servicio público, si le dan una oportunidad al ciudadano, y también si incorpora elementos de participación, empoderamiento, y de crear ciudadanía”, asegura el profesor Edgar Ortegón.
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