Desde su creación en 1987, el modelo Malcolm Baldrige ha servido como un referente para organizaciones en busca de la excelencia operativa. ¿Qué hace particularmente relevante a este modelo? Principalmente, su capacidad para adaptarse y evolucionar con el tiempo, como lo demuestra su más reciente actualización en 2018.
Aunque sus raíces se remontan a los Estados Unidos, su aplicación ha traspasado fronteras, siendo adoptado por diversas organizaciones tanto públicas como privadas en el ámbito global.
En este artículo abordamos los algunos de los pilares de este modelo, en base al libro Baldrige User's Guide: Organization Diagnosis, Design, and Transformation de John Latham y John Vinyard.
Perfil organizacional
Uno de los elementos fundamentales del modelo Baldrige es el perfil organizacional. Este es más que una simple descripción de la entidad; es una herramienta esencial que proporciona una visión completa del contexto en el que opera una organización.
Aquí es donde se analizan las relaciones clave, los desafíos estratégicos y los aspectos operativos, estableciendo así una sólida base para cualquier planificación y decisión futura.
Liderazgo estratégico
Hemos mencionado ya que el perfil organizacional es uno de los elementos fundamentales del modelo de Malcolm Baldrige; sin embargo, también es solo el comienzo. El verdadero "motor" del modelo Baldrige es su enfoque en el liderazgo estratégico.
Los líderes no solo deben establecer una dirección clara, sino también crear y mantener una cultura que respalde la excelencia y la mejora continua. Este enfoque en el liderazgo es lo que impulsa todas las demás áreas de la organización, estableciendo la dirección y las prioridades.
Excelencia en la ejecución
Junto al liderazgo, la excelencia en la ejecución es otro pilar crucial. Esta área se centra en la operatividad del día a día y en cómo los procesos y los recursos humanos son gestionados para lograr los objetivos estratégicos.
Se podría decir que mientras el liderazgo estratégico es el "motor", la excelencia en la ejecución es el "combustible" que hace que todo funcione. El personal no solo debe ser competente, sino también estar altamente comprometido con los objetivos de la organización.
Aprendizaje organizacional
Pero, ¿qué sucede cuando las cosas no salen según lo planeado? Ahí es donde entra en juego el aprendizaje organizacional. Este aspecto del modelo se concentra en cómo la organización procesa y aprende de sus éxitos y fracasos.
Tecnologías de la información, recopilación de datos y retroalimentación son esenciales en esta etapa, ya que proporcionan la oportunidad de revisar las estrategias y hacer ajustes cuando sea necesario.
Mejora continua
Finalmente, el modelo Malcolm Baldrige también proporciona una hoja de ruta para la implementación y el mantenimiento de estas prácticas a través de lo que se podría considerar una quinta sección: el proceso en sí.
En esta etapa se describen los pasos para diagnosticar, diseñar y transformar la organización en un ciclo de mejora continua. Un método efectivo para aplicar todo esto es el ciclo PHVA (Planificar, Hacer, Verificar, Actuar), que asegura un proceso de aprendizaje y mejora constante. El siguiente video explica a mayor detalle este ciclo:
En resumen, el modelo Baldrige no es simplemente un conjunto de reglas o directrices. Es un sistema de gestión integral que se adapta a diferentes tipos de organizaciones y permite alcanzar y mantener la excelencia en el desempeño.
En un mundo empresarial cada vez más complejo y cambiante, el enfoque metódico y centrado en la mejora continua del modelo Baldrige es más relevante que nunca. Aprende cómo aplicarlo a tu organización con la Maestría en Administración de Negocios (MBA) de la Escuela de Posgrado de la Universidad Continental. ¡Solicita más información!